lunes, 21 de abril de 2025

Francisco, el Papa universal

 

Hoy el mundo católico llora la partida de Jorge Bergoglio, el Papa Francisco, último representante de Pedro y Pontifex Máximus de la Iglesia en los últimos 12 años. En un mundo manifiestamente alejado de Dios y donde la preocupación por el prójimo es cada vez más singular, la humanidad y cercanía del Papa Francisco nos remitió fielmente al ministerio de Jesús: su consagración por los pobres y oprimidos del planeta.

Cuatro encíclicas redactadas durante su pontificado, desnudan las preocupaciones y el alma de Francisco: Lumen Fidei (2013) -redactada junto al anterior Papa, Benedicto XVI- explora la importancia de la fe en la existencia humana y su rol frente al relativismo moderno. Laudato Si' (2015), inspirada en el mensaje de San Francisco de Asís, promueve la protección del medio ambiente, la justicia social y la dignidad de los pobres. Fratelli Tutti (2020) se enfoca en la amistad cívica, resaltando valores como el ecumenismo religioso y Dilexit Nos (2024) invita a revalorizar el mensaje de Cristo como fuente de amor y compasión en un mundo marcado por las guerras, las desigualdades económicas y el egoísmo.

Al igual que Cristo, Francisco devolvió la fe a muchos y trajo de vuelta a miles de católicos a su religión (me incluyo entre los últimos), también tuvo numerosos detractores, algunos de los cuales lo tildaron cómiosamente de "Papa socialista", "justicialista/peronista", "populista", "progresista" y hasta "marxista", reflejando en su aguda ignorancia el desconocimiento de la dimensión espiritual del cristianismo, que prevalece sobre todo el conjunto de ideologías laicas y las antecede en no menos de 17 siglos, profundizando en valores como la dignidad humana (el cristianismo surgió de cara a prácticas como la esclavitud, recién abolida hacia los siglos XIX y XX), la libertad, la igualdad, la misericordia, el perdón, la humildad, la justicia, la solidaridad, la esperanza, la paz, la obediencia y el servicio.

Ciertamente, Francisco no tuvo el carisma de Juan Pablo II, pero a diferencia de este estuvo máxime comprometido con limpiar y reformar a la Iglesia Católica de sus vicios morales y estructurales (escándalos sexuales, finanzas vaticanas, reformas doctrinales...) al punto de ganarse cuantiosos enemigos internos como el polémico arzobispo Viganò. Amigo de los humildes, enemigo de las injusticias, defendió hasta el último aliento a Palestina, siendo uno de los pocos gobernantes occidentales en llamar al genocidio de Gaza por su nombre. Futbolero, maradoniano, apasionado por la obra de Borges, Dostoievski y el Martín Fierro de José Hernández, nuestro primer Papa latinoamericano, humano al fin y al cabo. 

Gracias por tanto Papa Francisco!

jueves, 17 de abril de 2025

Cui bono?

 
Cui bono? (¿quién se beneficia?) es lo primero que se pregunta e indaga una persona inteligente antes de rasgar vestiduras o repetir como cotorra y con nulo razonamiento lo que otros le inducen a pensar.

Los juristas y filósofos de la Antigua Roma, fueron los primeros en acuñar la frase, siendo el destacado orador y helenista Marco Tulio Cicerón quien la legó a la posteridad como lens crítica y herramienta fundamental para el análisis de la política y de la justicia. En tiempos de Cicerón, esta simple pregunta fue crucial para desenmascarar las conspiraciones y manipulaciones propias de la República Romana (lo cual terminó costándole la vida), resuena hoy en el estudio de la filosofía política, de la realpolitik y la geopolítica, en el análisis de la ética pública y en investigaciones criminales y forenses, invitando a meditar sobre los verdaderos intereses detrás de las acciones humanas.

En plena era de la sobreabundancia informativa, donde las fake news, el pensamiento único y la manipulación mediática dictan la norma, el análisis de "cui bono?" se presenta como un arte complejo. Un examen crítico de los intereses ocultos tras la información es vital para discernir la verdad entre tanta desinformación. La prensa independiente, a menudo más comprometida con la ética periodística, contrasta en este sentido con los grandes medios de comunicación, sujetos a intereses corporativos transnacionales. Esto quedó de manifiesto de manera grotesca con la persecución a Wikileaks en 2010, y la consiguiente detención de Julian Assange, quien enfrentó severas consecuencias por develar verdades incómodas, que comprometían a gobiernos inicuos como el de la administración Obama.

Hoy más que nunca, resulta fundamental promover y salvaguardar el periodismo independiente, puesto que su rol es esencial para el fortalecimiento de la democracia, garantizando que la ciudadanía tenga acceso a información veraz y crítica, que desafíe las narrativas oficiales y contribuya a un debate público informado.

lunes, 14 de abril de 2025

"Estados unidos no necesita aranceles, necesita una revolución"



La Guerra Arancelaria 2.0 de Donald Trump contra China y el resto del planeta, no puede menos que generar reproche y enfado en las personas conscientes del globo, que destacan la inconsecuencia de origen de la política proteccionista y su calculada afrenta contra la libertad de los mercados y las cadenas de suministro, en el trasfondo de un Estados Unidos que ha perdido competitividad global y es apenas algo más que una sombra de aquel país potentado que hace sólo unas décadas logró imponer pautas económicas universales como el Plan Marshall, el acuerdo de Bretton Woods o el Consenso de Washington.

Bajo este contexto, cibernautas y tiktokers chinos se han tomado el protagonismo en los últimos días con denuncias y críticas ácidas en sus canales, algunos develando -por ejemplo- el valor de producción en China de cientos de productos de lujo versus el precio de venta en Occidente (sujeto a la simple impresión de una etiqueta o marca) entre 30 a 600 veces superior, otros como el influencer @neil778027 tildan de estafadores a la clase política y oligárquica estadounidense, que por mero cálculo económico movieron las industrias a China, hipotecando el futuro de los trabajadores locales, abandonándolos a su suerte, hasta transmutarse progresivamente en una sociedad degradada de "gordos, adictos y pobres"

Mientras China aprovechó el empujón de ser "la maquila del planeta" para sacar a millones de ciudadanos de la pobreza e invertir en infraestructura, Estados Unidos se enfrascó en guerras interminables en países como Irak, Afganistán, Siria, Libia o Yemen, para beneficio directo de los plutócratas clientelistas de Washington y el complejo militar-industrial, cuyo lobby es transversal a los gobiernos demócratas y republicanos. Por todo lo anterior remata el tiktoker chino: Estados Unidos no necesita aranceles para salir del pantano, necesita una revolución, despertar, desengañarse.